domingo, 25 de diciembre de 2011

a mis compañeros de 2011

Cuando entra diciembre, me da muchisimo por ponerme a reflexionar sobre todo lo que sucedió en los once meses precedentes a estas fechas, así como en lo que me deja y lo que se lleva este año, me gusta reflexionar y descubrir que me dejó mas cosas de las que se llevó, mas aprendizajes, pero sobre todo, creo que este fue el año del descubrimiento de las personas. Así es, descubrí como es que muchas personas que siempre habian sido solo eso, llegarón a convertirse en mis amigos, y, lamentablemente tambien, muchos amigos pasaron a ser simplemente personas, supongo que esa es la manera en que el año queda “tablas” conmigo.

Y es precisamente en este punto, en el que quiero agradecer a todas esas personas que se hicieron mis amigos, sobre todo, por que no es algo que me esperaba, desde aquella chica con la que platique en una fiesta y que, sin importar que la vuelva a ver o no, una parte de mi ya le tiene un sincero aprecio, hasta aquella locutora que pasó de ser solo eso a una de las amigas que espero que Dios me permita tener por muchos años en mi vida, muchas gracias a ambas por que forman parte de esos milagros que la vida nos regala de la forma mas perfecta que pueda existir: con una sonrisa inesperada.

Por otro lado, me dejó grandes amigos que entraron en mi vida siendo simples compañeros de un trabajo que muy probablemente me consumió mas de lo que me ayudo, pero que, sinceramente, me hacia ir hacia el con una sonrisa en la cada, por que me regala en cada carcajada sincera la capacidad de ser una mejor persona, gracias a esos compañeros de trabajo que se convirtieron en amigos, y que sinceramente, yo quisiera que se quedaran en mi vida como compañeros de vida. Gracias, por que la vida me permitió conocerlos de verdad y no como simples entes que paseaban por las aulas que teníamos en común, gracias por permitirme descubrir su talento y hacerme entender que la vida es mas que hacer berrinches, los quiero muchísimo.

Desgraciadamente, este año entre sus horas se llevó cosas de vital importancia para mi, cariños que yo siempre considere verdaderos y que, simplemente desaparecieron en menos tiempo del que yo pensé, posiblemente la culpa fue mia, posiblemente no, pero, sin buscar culpables o verdugos, solo me atrevo a pedirles una disculpa por lo que en mi concierne, y disculparles por lo que a ustedes les toca, la guerra nunca tiene sentido, y eso de odiar a la gente, creo que no se me da muy bien.

Este año me ayudó también a reforzar amistades que yo nunca pensé que fuera necesario reforzarlas, no tengo palabras para agradecer a todo aquel que se haya subido al escenario por mi causa y dado su mayor esfuerzo en el, gracias, por que, sin importar que las mamparas se cayeran, que el texto se quedara tras bambalinas o que su voz se la tragaran las butacas ustedes confiaron en mi y al hacerlo, me hicieron mejor persona, en verdad, esa ha sido una de las experiencias mas bonitas de mi vida, y sinceramente, al final de cuentas me hicieron comprender, que mas haya del resultado, lo que verdaderamente trasciende, es el camino, y la forma de recorrerlo.

Me dejó recuerdos inolvidables, ideas que con solo evocarlas aquellos que estuvieron presentes los recordaran junto conmigo y sonreirán: canciones bajo la lluvia, idas al cine, besos y abrazos perfectos (por ser inesperados), peleas en parques, eventos personales de poca audiencia (exámenes y baby shower),  funciones al aire libre, golpes por tubos, frenos voladores, descomposturas de autos, palabras llegadoras, frases celebres, jugadas de rock band, cumpleaños inesperados, quedadas de Franquie, composturas del mundo desde una banqueta, viajes ajenos… en fin, tantas cosas que me deja, que solo puedo decir, como una de mis hermanas dijo: 2011, no te acabes, y de ser así, que sea por que viene otro igual!... (o mejor) ...

A todas las personas que descubrí este año, no me resta mas que decirles GRACIAS, por que forjaron mi vida mas de lo que pensaba, al llenarla de luz cuando era necesario, y al obscurecerla, cuando descubrieron la necesidad imperativa que tengo de madurar, gracias por madurar conmigo, y a los que no lo hicieron, gracias, por permitirme sonreír desde la perspectiva de un niño… desde el fondo de mi corazón, solo me resta desearles que este año les traiga dicha, felicidad, y sobre todo, muchas cosas por aprender y una esperanza nueva cada día…

Y a decir verdad, no se a ciencia cierta a donde me lleve el destino el próximo año, pero no me importa, por que mientras encuentre Ángeles de su tamaño, la vida simplemente me seguirá teniendo tan consentida como hasta hoy.

viernes, 9 de diciembre de 2011

a la musica (8)

Hay pocas canciones que tienen la capacidad de hacerme sonreír simplemente por sus acordes guardados… sin importar las palabras que tengan dentro, me sacan una sonrisa, ya sea por sus acordes, o por la magia de llevarme directo a un hermoso recuerdo…

Y es que realmente la vida es imposible sin música, no por que sea un invento novedoso e increíble, sino por todo lo que maneja en los acordes mas sencillos, por la capacidad que tiene de llegar a cada uno de nuestros sentidos, sin importar que no sean mas que sonidos que percibe solo el oido

¿Cuántas veces no cerramos los ojos y vemos un color diferente con escuchar cierta pieza?

O se nos enchina la piel… o recordamos una aroma o un sabor se nos viene a la mente al compás de una melodía, cuan necesaria es para nosotros por su poder de evocación.


Hasta cierto punto es estupido decir que tiene la capacidad de expresarlo en hermosas palabras, por que, si es la canción con la que nos identificamos, las palabras no son hermosas, son solo las correctas, es cuando decimos: ni yo mismo lo hubiera dicho mejor que esa canción

Me gusta sentir que dentro de una canción (no importa si la canta José Alfredo Jiménez o Molotov, o Belinda) hay alguien que, de una u otra manera pasa por la situación que yo atravieso, me gusta sentir que puedo encontrar el consuelo y a veces, hasta el consejo, en una canción, pues, hay cierta empatia que trasciende al espacio, sin importar que tenga letra o no, igual puede llevarme al estado necesario para enfrentar todo lo que venga a mi vida, y al decir todo lo que venga, no quiero abarcarlo en un modo deprimente y fatalista, sino en todo lo que el destino me mande, sea bueno o sea malo.

gracias a la música, puedo escapar de mi misma, permitirme ser lo que no soy y simplemente regresar al mundo, para seguir siendo la que soy, descansar de mi propia sombra… entonces, la música es también, una vía de escape a la realidad que, cuando nos deja regresar, nos da mas fuerzas para salir adelante… la música es paralelamente unas ligeras vacaciones de uno mismo, y el identificarse con lo que uno es. Las canciones son las mini vacaciones que uno se toma para encontrarse a si mismo.

Amo identificarme con las canciones, identificar a las personas con las canciones… y escapar del mundo refugiándome en una canción, considero que vivir sin música, es como morir despacito…. Y es eso lo que muchas veces me hace sentirme triste…





Es pues como un excelente placebo, como la sonrisa de un enamorado cuando alguien le nombra a su amada